Un ejemplo de empresas unidas que venden al mundo

APOYO DE LOS SECTORES PÚBLICO Y PRIVADO A LAS MAQUINARIAS AGRÍCOLAS

Distintas entidades se reunieron para elaborar una estrategia que les permitiera llegar a nuevos mercados. Hoy, participan de ferias internacionales. 

Delia R. Flores / El Cronista

Un claro ejemplo de cómo la unión entre lo público y lo privado ha dado como resultado la presencia argentina cada vez más marcada en el sector de las maquinarias agrícolas.
Acabo de regresar de Sudáfrica, donde he acompañado a los integrantes del Pabellón Argentino de Fabricantes de Maquinarias Agrícolas, en “Nampo Harvest Day 2011”, en la Ciudad de Bothaville. Además, el año pasado estuve en la Feria Golden Autum de Moscu. Estas dos incursiones han sido suficientes para inspirarme a escribir esta nota.
En un país donde las individualidades son una constante, poder distinguir cómo un grupo de instituciones privadas y públicas han sabido unirse tras un objetivo en común, es un lujo que bien puede servir de modelo para otros sectores.
Fabricantes de maquinarias agrícolas que se juntaron en Cideter, allá por el año 1994, para ver cómo podían llegar a los mercados del exterior. Para ello convocaron a la Cámara Argentina de Fabricantes de Maquinaria Agrícola (Cafma) y al Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA). Así nació este plan estratégico de exportación.
Eligieron la siembra directa como estrategia.
La siembra directa no solo permite la mayor productividad del suelo, sino que tiene la gran ventaja de la conservación de los suelos y el aprovechamiento de la humedad en su máxima expresión.
Este tipo de siembra es la tecnología que servirá para la colocación de bienes de capital de origen argentino. Es la estrategia de penetración en el mercado del África Subsahariana y se seleccionó a Sudáfrica como país para la difusión del know how argentino en materia de siembra directa.
Pero el África Subsahariana es una de las tres regiones seleccionadas dentro de este plan estratégico. Las otras son Oceanía y Europa del Este.

A cada cual su juego

Dentro de éste “gran equipo público y privado” cada uno tiene su rol específico: los técnicos del INTA experimentan en los campos de extensión agrícola de las distintas regiones. Por su parte, Cancillería busca las contrapartes y realiza misiones exploratorias. La Fundación Exportar realiza las rondas de negocios y se hace cargo de los stands y, en algunos destinos, aporta dinero. Las provincias de Santa Fe, Córdoba y Buenos Aires también contribuyen de forma monetaria y con estructura. El Ministerio de la Producción financia a través de Proargentina.
Un buen ejemplo de que se pueden superar los individualismos en pos de un fin superior, donde la obra trasciende al hombre. Tras un plan estratégico a largo plazo, que es lo que en definitiva tanto le falta a nuestro país. –